La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, acusó al fiscal general del estado de Morelos, Uriel Carmona Gándara, de querer encubrir el feminicidio de Ariadna Fernanda López Díaz, cuyo cuerpo fue encontrado en la carretera rumbo a Tepoztlán, Morelos, debido a que tiene presuntos nexos con Rautel, acusado por la Fiscalía General de Justicia capitalina (FGJ) de participar en el asesinato.

En el Antiguo Palacio del Ayuntamiento exhibió fotografías autorizadas por la fiscalía capitalina, a las que calificó como “fuertes imágenes” del momento en que presuntamente Rautel carga el cuerpo de Ariadna Fernanda y lo mete a un vehículo.

“Ella, ya sin vida, es cargada por la persona que se entrega el día de hoy [ayer]. Ahí identificado. Él asiste a su velorio y hace esta declaración”, expuso mientras mostró la entrevista que dio Rautel en el funeral de la joven donde refiere que “ella se fue solita”.

“Presento este caso porque no queremos que haya impunidad en ningún caso, pero en particular en los feminicidios, donde incluso, trataron de inculpar a la víctima, en este caso es evidente que la Fiscalía de Morelos quiso ocultar el feminicidio de Ariadna, presuntamente por sus nexos con el probable feminicida”, aseguró al recordar la conferencia de Carmona Gándara en la que se indicó que la necropsia arrojó que la muerte había sido por intoxicación alcohólica.

“Si ustedes escuchan al fiscal general de Justicia de Morelos, dice: ‘No hay signos de violencia, científicamente comprobado, no es feminicidio’. Sí fue feminicidio, sí lo fue, el caso de Ariadna es un feminicidio, hay pruebas”, aseguró Sheinbaum Pardo, quien expuso que la necropsia practicada por expertos de la capital arrojó que murió por múltiples golpes y ya hay dos sospechosos.

Por lo que, dijo, la FGJ analiza los nexos entre Rautel y Carmona; sin embargo, no dio más detalles y pidió que se diera vista a la Fiscalía General de la República (FGR) para que se revise la actuación de la autoridad.

Indicó que previo a dar la conferencia, lo platicó con el presidente Andrés Manuel López Obrador y el secretario de Gobernación, Adán Augusto López.

Agentes de la fiscalía capitalina lograron rastrear que el imputado tenía contacto con personal de la Fiscalía de Morelos durante la semana previa a que encontraran el cuerpo de Ariadna. Rautel habló con varias personas de allá, según la sábana de llamadas de dos de sus teléfonos celulares.

Incluso, el día de los hechos, habló por cerca de 10 minutos con personal de aquella fiscalía y luego, aparentemente, de que se dejó el cadáver donde fue encontrado por ciclistas, volvió a llamar al mismo número.

Por la noche, en un comunicado, la fiscalía de Morelos dijo que su titular rechazó los señalamientos “realizados por cualquier servidor público” hacia su persona, pues carecen de sustento. Pero informó que entregarán todas las actuaciones a la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México. Estableció que la necropsia fue realizada por médicos forenses certificados y ajenos a la fabricación de delitos.